10 años!
En mayo de 2014 la crisis económica mató la vaca de la que vivía desde hacía 7 años en la empresa consultora. Fue una muerte anunciada que viví con sosiego y que me encamino a dar el paso que deseaba desde hacía un tiempo: trabajar de manera independiente y hacerlo con un estilo diferente.
Así nació IMPULSA, una marca con sello personal a través de la que llevo a cabo una labor de asesoramiento y formación a profesionales y equipos desde la creencia de que el cliente siempre es completo y lleno de recursos y que por ello sólo necesita «leves impulsos».
En estos años mucho agradecimiento a las fuentes de las que crecí en aprendizajes. Gracias María Carrascal Rueda y a todo el equipo de Emana Formación por sus potentes programas y propuestas, que me activaron una nueva mirada, metodología y herramientas. A Mercedes Lezaun, para mi modelo de profesionalidad y experiencias y a Sílvia Carreras Gracia proveedora primero, clienta después, compañera siempre.
A mi colega y compañera de andaduras Nuria Bustamante Gallejones gracias por su escucha paciente, por compartir experiencias y sostener mis dudas. ¡Cuánto aprendo de nuestras inspiradoras conversaciones! Juntas nos embarcamos en Empresas con Corazón desde nuestra confianza en el valor de humanizar las organizaciones
Gracias Leyre Cano. Nuestros caminos se cruzaron siendo aire-tierra. Fuerzas en tensión que hemos conseguido mantener en buen equilibrio. Juntas creamos Juego para el cambio, aunque paralelamente hayan surgido muchos otros proyectos.
Muchos otros/as compañeros/as de los últimos años: Leyre Garcia, Elisabeth Sudupe, Sofía Facal Belli, Eñaut Aranbarri o de diferentes proyectos compartidos: ¡Gracias Nieves Barahona por mucho!
El capítulo de clientes se me hace difícil. Muchas empresas y muchos nombres propios. Destacar por nuestra relación en el tiempo mi agradecimiento a Pilar Laiseca, Iñigo Diego y Ana Gallego Gonzalez de Ingeteam por confiar todos estos años. Gracias Estíbaliz Echeverría Portero por llevarme en tu viaje, a Sol Castilla Enet por compartir el valor de las personas y confiarme proyectos de valor y a Larraitz Urrestilla Beloki por sumarme con confianza a su equipo en estos últimos meses. Hay muchos más, lo sé. Como dicen en uno de los que me dejo sin nombrar: estoy satisfecha de que llevan un poquito de mí.
Gracias a Amaia Etxeberria de Cámara de Gipuzkoa y Cristina Zariquiegui Azcárate del Club de Marketing de Navarra por abrirme las puertas a impartir muchas formaciones y a Sonia Ortuondo de OFYDE CONSULTORES por ponerme al frente de complejos proyectos desde la confianza de estos 17 años que llevamos juntas. De ti he aprendido a ser práctica.
Y por último, gracias Miriam, socia sin firma, asesora sin puesto, compañera siempre de este y cualquier viaje.
10 años. Lo celebro trabajando porque cuando hay vocación, como es mi caso, la línea de lo profesional y personal se desdibuja y la separación entre trabajar y celebrar apenas existe…